En el contexto del cierre de centrales nucleares en Alemania y el abandono del gas natural ruso, Francia está entrando en una nueva era como el principal exportador de electricidad de Europa. Según el último estudio de Standard & Poor\s, Global Commodity Insights, en 2023, la cantidad de electricidad exportada por Francia alcanzó la asombrosa cifra de 50,1 teravatios-hora, superando a Suecia, que mantuvo el récord en 2022. Este logro convierte a Francia en el país líder en exportación de electricidad, mientras que Espa?a ocupa el segundo lugar con una exportación de 13,9 teravatios-hora.
Los analistas de Standard & Poors se?alan que el excelente desempe?o de Francia en la exportación de electricidad se debe principalmente a su estrategia de devolver la energía nuclear al sistema de producción importante, y el aumento de las energías renovables también ha jugado un papel importante. En 2023, la energía generada por paneles solares y parques eólicos en Francia fue de 21,5 teravatios-hora y 50,4 teravatios-hora respectivamente. Estas cifras muestran que Francia está utilizando eficazmente sus abundantes recursos de energía nuclear y la creciente energía renovable para consolidar su posición como una potencia exportadora de electricidad.
Sin embargo, a pesar del notable progreso de Francia en la producción de electricidad, esto no ha protegido a los consumidores nacionales del aumento de los precios de la electricidad. A partir del 1 de febrero de 2024, se espera que el precio de la electricidad para los consumidores franceses aumente entre un 8,6% y un 9,8%. El ministro de Economía francés, Bruno Le Maire, anunció que para el 97% de los hogares franceses, el aumento del precio de la electricidad será inferior al 10%. La implementación de esta medida puede deberse a la volatilidad del mercado energético mundial y a las continuas inversiones en sostenibilidad ambiental.
Mientras tanto, 400.000 usuarios de la empresa operadora nacional francesa, Electricité de France (EDF), se enfrentarán a un aumento de tarifas aún mayor, que se espera que alcance el 10,1%. Para mitigar este impacto, EDF ha propuesto un incentivo que anima a los usuarios a reducir el consumo de electricidad en días específicos para obtener tarifas preferenciales, garantizando así la demanda de electricidad a escala nacional. Esta estrategia refleja la consideración integral del sector eléctrico francés para satisfacer las necesidades de electricidad nacionales e internacionales, al tiempo que estabiliza la red eléctrica y protege los derechos de los consumidores.
Francia, como líder en la exportación de electricidad en Europa, está atravesando un período crucial. Por un lado, el uso eficaz de la energía nuclear y renovable contribuye con importantes recursos energéticos al mercado energético de toda Europa e incluso del mundo; por otro lado, el ajuste del mercado eléctrico nacional y el aumento de los precios de la electricidad también plantean nuevos desafíos al gobierno francés y al sector eléctrico. En el contexto de la transformación energética mundial y el cambio climático, la forma en que Francia equilibre las necesidades energéticas nacionales e internacionales será clave para su futura política energética.